Quiero decir que no hablo bien castellano. Que lo olvidé para perfeccionar el italiano, pero que en un mes lo hablaré sin problema. En la pretemporada me entenderán bien.
Hay jugadores que nacieron para jugar en el Madrid, ¿usted nació para entrenar aquí?
No sé si he nacido para entrenar al Madrid, pero sí para ser entrenador y me gustan los retos más importantes. Del Madrid me atraen su historia, sus frustraciones de los últimos años y las expectativas de ganar. Es un club único y no entrenarle es un hueco en una carrera para un técnico. Bonito, bonito, bonito no es entrenar o jugar en el Madrid, bonito, bonito, es ganar en el Madrid y así se lo diré a los jugadores.
Si no gana, ¿entendería su destitución?
Todos los técnicos han de estar preparados para una destitución, pero si se tiene miedo no se trabaja bien. Yo tengo mucha autoestima y autoconfianza y no pienso en el despido. Cuatro años de contrato son suficientes para ganar y construir un equipo con identidad y de futuro. La destitución de Pellegrini no me hace feliz, pero así es el fútbol. Tengo confianza en mis jugadores y supongo que ellos en mí. Agradezco al presidente, a la Junta y a Valdano que pensaran en mí. Prometo no cambiar. Soy Mourinho con mis cualidades y defectos.
¿Cómo hará del Madrid un equipo campeón?
Hablaré lo menos posible. Diagnosticar es más difícil que decidir y lo primero es conocer el club, transformar cosas según mi manera de trabajar y las necesidades. Tengo confianza en los que están aquí y hablaré con ellos. No habrá cambios radicales, serán adaptaciones.
¿Tendrá mano en la confección de la plantilla?
Sólo soy entrenador. Trabajo en grupo porque un técnico sin una gran estructura no es un gran técnico. Es fundamental la calidad de los que trabajan conmigo. Es el momento de empezar a conocer mi nuevo club, hacer preguntas y darme cuenta dónde estoy.
¿Qué opina de Cristiano?
Es un jugador importante, no sólo en el Madrid, también en el mundo del fútbol. Es increíble, pero más importante es el equipo, que está por encima de las individuales. A Cristiano le gusta ganar y a mí también, por lo que no será difícil persuadirle de que lo más importante es el club, más que los jugadores y el entrenador.
¿Se siente el mejor entrenador del mundo?
Hay un grupo de grandes entrenadores, que son los que tienen calidad y suerte. Pero eso lo deciden los resultados. No soy un falso humilde y me parece que en la temporada 2009-2010 gané todos los galardones gracias al equipo. No puedo olvidar a mis ex jugadores, son fantásticos. Espero que puedan ganarlo todo menos la Champions.
¿Cuál será su relación con Valdano? Defendió a Pellegrini hasta el último momento.
Él ha defendido a su entrenador hasta el final. Los que no lo hacen sí son peligrosos. Quiero trabajar con gente como él. Quiero honestidad intelectual y en la práctica.
¿Qué objetivo se marca para la próxima temporada?
Mis objetivos no son distintos a otros clubes: construir un presente y un futuro. Necesito tres o cuatro años para lograr todos los objetivos. Por eso estoy aquí. Siempre conquisté un título europeo en mi segundo año. Así gané la Champions con el Oporto, llegué a semifinales con el Chelsea y volví a conquistarla con el Inter. Necesitamos tiempo para tener un equipo con identidad, pero podemos construirlo para lograr títulos este año pese a que el español es un campeonato difícil, con un adversario tremendo. También hay adversarios en la Champions. No hago promesas, salvo ser Mourinho, una persona que trabaja y que quiere ganar.
¿Cómo ve a Raúl?
He hablado con él esta mañana. No he perdido el tiempo. Él estaba entrenándose y yo desayunando. De lo que ha pasado no hay que decir nada a la Prensa. Aún no he hablado con Valdano ni con el presidente. Yo no he hecho nada por el Madrid ni estoy en su historia. Él sí y yo debo respetarle y ser honesto con él. No puedo tratarle como a un jugador cualquiera.
¿Qué defectos tenía el Madrid de Pellegrini?
No es éticamente correcto. A Pellegrini le gustarían unas cosas del Inter y otras no, pero nunca habló de mí. Le respeto y espero que su futuro sea bello, a la altura de su calidad. No quiero hablar del Madrid del año pasado, aunque vi los partidos.
¿Cree que puede romper la hegemonía del Barcelona?
No soy antibarcelonista. Soy entrenador del Madrid y esa es mi preocupación. Es un gran rival en Champions y en las competiciones domésticas, pero no quiero pensar en él. Si soy odiado en Barcelona, es un problema de quien me odia, no mío. He preparado con profesionalidad diez partidos en cinco años contra ellos y lo haré en el Madrid. El miedo no está en mi diccionario. ¿Puede ser el primer partido de Liga contra el Barcelona? ¿No? Mi primer partido en la Premier fue contra el Manchester y el segundo en Italia, ante el Milán. Si fuera el primero sería fácil porque no hace falta motivar a los jugadores.
¿Apostará por fichajes españoles?
La identidad de un equipo no tiene que ver con la nacionalidad de los jugadores, la identidad es la que es y no va a cambiar. La futbolística es la que ponemos los que trabajamos en el día a día. No me gusta hablar de jugadores, porque si lo hago cada palabra encarece un millón el precio. Y diez palabras lo suben diez millones. El club está contento con la base del año pasado y yo también. No necesitamos cambios enormes y dramáticos. Sólo tres o cuatro jugadores para tener más posibilidades de adaptación a un ideal de juego. No será un verano para escribir. Será tranquilo. Mejor escribir de Sudáfrica.
¿Es el mayor reto que ha afrontado en su vida?
No es el mayor reto, porque mi mayor ambición es la siguiente, y la siguiente es el Madrid. No cambio mi nivel de motivación o ambición, me hice a mí mismo con esta mentalidad. Lo doy todo y no siento una presión distinta. Hice suficiente para merecerme estar aquí. Llego por lo conseguido en otros clubes pero no duermo en los laureles. Quiero más más y más. El presidente me enseñó las copas logradas y hablamos de que tenía nostalgia de la última. Le dije que lo mío fue hace una semana y ya lo echo de menos. Lo que yo quiero para mí es lo que quiere el Madrid. Queremos lo mismo a día de hoy.
¿Fichará de la Premier?
Hablar de Maicon, Lampard o Cole es normal porque saben que mantengo conexiones. Pero primero hay que ver lo que hay y haremos algunos ajustes. Más que de nombres, hablamos de perfiles.
¿Piensa cambiar su modo de jugar en el Madrid?
He jugado tres finales de competiciones europeas, una UEFA y dos Champions, y ganamos las tres y marcamos ocho goles. Cuando se repite una mentira muchas veces, para los no inteligentes se transforma en una verdad. Pero en el fútbol hay más personas inteligentes que aquellas que no lo son. Por tanto, la mentira sigue siendo una mentira. Una cosa es la organización del juego y otra el juego defensivo y cuando uno es organizado defiende muy bien y puede jugar con hombres de ataque y jugar bien defensivamente. Yo sacaba a Pandev, Etoo, Milito, Sneijder y Motta, todos muy ofensivos y defendíamos bien. ¿Por qué? Porque había un gran entrenador.
¿Tras su paso por el Inter quién es ahora más rico, el Calcio o Mourinho?
Soy un técnico que mejora cada día y si trabajé en Italia dos años, aprendí de ello. Eso es humildad. Yo soy más rico y mejor técnico tras trabajar allí. Espero decir lo mismo cuando acabe con el Madrid. Seré más culto tácticamente. El fútbol italiano es rico porque es campeón del mundo de selecciones y de Europa de clubes.
¿Qué técnico le aconseja a Moratti para el Inter?
No le he aconsejado. Hay un equipo de futuro, aunque a Zanetti, Materazzi o Córdoba no les queda mucho. Hay una buena estructura y el que llegue, si es inteligente, seguirá la trayectoria y tendrá éxito. Cuenta con la suerte de que le regalo la posibilidad de ganar tres títulos: Supercopa de Europa y de Italia y Copa Intercontinental.
Le ven como un provocador.
No soy un provocador, sino un trabajador. Y como trabajo mucho quiero respeto. Si tenemos respeto, perfecto. Si no, debo defender a mi grupo.
¿Adaptará su estilo al juego que le gusta al Bernabéu?
Adapto su filosofía a los jugadores que tiene para sacar lo mejor de ellos. Pocos son los que no mejoraron conmigo o tuvieron grandes temporadas. Están revalorizados por el trabajo que hicieron conmigo. Un equipo debe estar hecho de equilibrios: jugar bien con balón y sin balón, ser psicológicamente fuertes, ganar partidos, y ganar los partidos que sean decisivos, donde sea necesario no sólo calidad futbolística sino también humana, mentalidad y una fuerza psicológica muy importante. Sin esa fuerza psicológica es imposible ganar partidos importantes y títulos. Un club pasa a ser la segunda familia y ellos pasan a ser mi familia y yo la suya. Por eso necesitamos grandes niveles de empatía para lograr éxitos. Mis jugadores lo son para siempre.
¿Qué sentiría si un jugador suyo no se sube al avión tras ganar la Champions?
Lo más importante es ganarla, no lo que viene después. Y luego depende de la razón por la que no entras en el avión.
¿Cómo será su plan?
Lo que yo haga es problema mío.
¿Promete que el Madrid llegará lejos en la Champions?
No, no puedo. Fútbol es fútbol. Lo que puedo prometer es que el Madrid no es cabeza de serie, pero en el momento del sorteo el miedo no será nuestro sino de los que jueguen contra el Madrid. Jugaremos contra Inter, Chelsea, Manches-ter, Bayern No quiero miedo en el vestuario, sino en el contrario. Ellos buscarán la suerte, no nosotros. Después son 12 partidos hasta la final. Por tradición, me llega siempre el más difícil, pero la mentalidad es que el Madrid tiene una historia increíble en Champions, tiene una historia increíble negativa pero ni lo positivo ni lo negativo cuenta. Iremos partido a partido, pero sin obsesión. Me gusta la palabra sueño, no obsesión. Entiendo que en la prensa y la afición de Madrid haya un gran nivel de presión, pero no es un problema, es un factor de motivación.
¿Qué opina de Casillas?
Es un portero fantástico. Mi entrenador de porteros también lo es. Con Vitor Baía logró que fuera el mejor de Europa. Con Cech también. Espero que esta temporada también lo logre con Julio César y el próximo año con Casillas. A Iker no lo conozco personalmente, pero es un portero que me gusta muchísimo. Es fácil defender cuando se juega con jugadores defensivos. Lo difícil es defender bien cuando se juega con jugadores ofensivos. Mis equipos tienen gran solidaridad, trabajan bien defensivamente, marcan goles, ganan partidos y logran títulos. Son equipos equilibrados y con ambición.

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